Barcelona y la industria del futuro
Marta Lao
Senior Associate, Osborne Clarke
Victor Garcia
Risk & Internal Control Director, Applus+
Barcelona, una ciudad con tradición industrial
Barcelona siempre ha sido uno de los motores industriales de España y de Europa. La industria barcelonesa, entre la que destaca la textil, la automovilística, la química, la farmacéutica, y la alimentaria, entre muchas otras, junto con una situación geográfica privilegiada de la ciudad, han posicionado a Barcelona como un referente industrial y comercial en la región.
No obstante, en los últimos años, el sector secundario ha sufrido una importante transformación que parece haber impactado en el liderazgo de la ciudad en este ámbito.
Crisis…
A todo ello se suma que vivimos tiempos convulsos desde prácticamente todos los puntos de vista: la pandemia de COVID-19 ha acelerado algunos cambios que se venían gestando ya en los años previos, y ha revelado situaciones que, en un mundo globalizado sin grandes turbulencias, pasaban algo desapercibidas.
Probablemente algunas de las que ahora se nos antojan más evidentes son la excesiva dependencia de otros países (y continentes) en la producción de bienes esenciales, y de sistemas de distribución menos robustos de lo que imaginábamos. “Basta” un barco encallado en el Canal de Suez, o el desajuste temporal entre oferta y demanda post-pandemia (en algunos mercados como el de microchips) para poner en jaque el buen funcionamiento del mercado a escala global.
… y oportunidad
La confluencia de estos factores, junto con el proceso de digitalización que está cambiando nuestra forma de vivir, consumir y producir, hace que este momento sea idóneo para iniciar un proceso de “re-localización” de aquellas industrias que trasladaron sus centros productivos a lugares con mejores estructuras de costes. Esta diferencia de costes seguramente pueda ser compensada con la mayor eficiencia que podemos conseguir a través de la robotización y la reducción de los tiempos de transporte. En este proceso de re-localización, Barcelona puede competir con sus vecinos europeos ofreciendo talento cualificado a menor coste, y también atrayendo talento externo interesado en asentarse en la ciudad.
Lo importante para aprovechar esta coyuntura es definir una estrategia de reindustrialización, en la que demos respuesta a una serie de preguntas:
– ¿En qué sectores debe enfocarse esa reindustrialización en Barcelona?
Debemos elegir los sectores y subsectores industriales en los que Barcelona pueda competir. Tiene sentido apostar por industrias (que requieran acceso a los recursos disponibles en la zona) que tengan un alto valor añadido.
– ¿En qué actividades debemos centrarnos?
Debemos identificar las actividades concretas, dentro de cada sector y subsector industrial, en las que las empresas que se implanten en Barcelona puedan desarrollar una ventaja competitiva. En ese sentido, la ciudad debe apostar por industrias con potencial de futuro como podrían ser las relacionadas con digitalización, movilidad eléctrica, etc.
– ¿Cuál es el plan de acción?
Parece lógico pensar que dicho plan debe tener en cuenta factores como la sostenibilidad y la digitalización, y debe apostar por la colaboración entre instituciones y sector privado.
Deben aprovecharse los fondos europeos que van a ponerse a disposición de los países miembros para reparar los daños causados por la pandemia de COVID-19. Barcelona como ciudad debe estar preparada para recibirlos y aprovechar la oportunidad de impulsar un cambio en su industria.
Además, será imprescindible también que esas inversiones se vean incentivadas no solamente por la colaboración público-privada derivada de los fondos europeos; también requerirá, para impulsarse, de inversiones en las infraestructuras clave que permitan convertir Barcelona en un hub, como el corredor mediterráneo y la ampliación del aeropuerto.
En resumen, la ciudad de Barcelona está ante una oportunidad única de transformarse de nuevo y recuperar tracción en su papel histórico de locomotora industrial. Barcelona tiene todo lo necesario para afrontar este reto, si bien es imprescindible que todos los actores involucrados en el sector aporten su granito de arena. Se trata de recuperar la tradición de consenso que en su día impulsó la transformación industrial en Barcelona, involucrando a los mejores expertos del sector, y dejando de lado conflictos y trabas.
Recuperemos la ilusión (individual y colectiva), para hacerlo posible.
Si quieres conocer las últimas noticias sobre Barcelona, su talento y sus proyectos, suscríbete a nuestro Blog.