La Barcelona de la tecnología

Barcelona es apreciada en todo el mundo por su arquitectura, gastronomía y riqueza cultural, pero, más allá de su atractivo estilo de vida, es también una capital tecnológica de primer orden

Considerada el hub 5G del sur de Europa, Barcelona cuenta con un distrito de la innovación, el 22@, que se ha convertido en referente internacional por su capacidad transformadora, al tiempo que alberga varios parques tecnológicos e importantes infraestructuras punteras vinculadas a disciplinas como la inteligencia artificial.

La capital catalana es también sede de numerosas start-ups y empresas internacionales dedicadas a las nuevas tecnologías, que contribuyen a apuntalar la capitalidad digital de una ciudad que hasta 2030 acogerá el Mobile World Congress, la mayor feria mundial de la comunicación móvil.

A primera vista, puede parecer que Barcelona tiene todos los ingredientes necesarios para convertirse en el próximo Silicon Valley, con una fuerte presencia de ferias y empresas de tecnologías de la información. Sin embargo, esto no es suficiente, y la ciudad no puede dormirse en los laureles. Para triunfar de verdad en la industria tecnológica, Barcelona debe utilizar la tecnología para alcanzar los objetivos de la ciudad y servir a sus habitantes, en lugar de centrarse únicamente en la tecnología en sí.

Barcelona se vuelve inteligente

Una forma de hacerlo es utilizar la IA para ofrecer mejores servicios públicos y utilizar los datos para no quedarse atrás en la era digital. Sin embargo, es importante poner límites a la privacidad y evitar convertirse en un Estado «gran hermano». El proyecto «Ciudadano Inteligente» es un ejemplo de cómo Barcelona trabaja en este sentido.

Aunque una ciudad puede volverse más inteligente instalando sensores o cámaras, es la propia población de la ciudad la que puede ofrecer datos valiosos sobre cómo mejorar la convivencia. Recoger estos datos es complicado por cuestiones éticas y de privacidad, pero Barcelona ha asumido el reto de desarrollar un sistema que pueda beneficiarse de ellos en el futuro. Crear espacios de comunicación y retroalimentación será clave en el éxito del proyecto.

Otro aspecto importante que el Ayuntamiento de Barcelona debe seguir trabajando es la reducción de la brecha digital entre la población, asegurando que todo el mundo tenga acceso a los beneficios de la tecnología, independientemente de su estatus socioeconómico. El acceso a los ordenadores portátiles es fundamental, dado que cada vez más aspectos de la vida cotidiana como la búsqueda de empleo, la gobernanza y otras áreas de participación social se han trasladado al espacio digital. Internet ya no es una mercancía, sino una necesidad.

Talento tecnológico barcelonés

Al preguntar a empresas tecnológicas como SAP por qué han elegido Barcelona para instalar sus hubs, sus respuestas se dividen en dos categorías:

Por un lado, «Barcelona está llena de gente con talento y ofrece una gran diversidad», según Esperanza Valbuena, VP Mid-Market Digital Sales EMEA South de SAP. Sin embargo, para mantener una ventaja competitiva en el mercado internacional, Barcelona «necesita urgentemente invertir en educación». Impartir cursos tecnológicos en etapas tempranas en las escuelas públicas es crucial para preparar el talento local frente a la creciente competencia procedente de Asia. «La mejor lengua extranjera para aprender es la codificación», según Svetlana Velikanova, fundadora y directora ejecutiva de Harbour Space University, que también lamenta el bajo nivel de matemáticas en las escuelas españolas en general.

Por otro lado, es la propia ciudad la que ofrece un estilo de vida muy atractivo que sus empleados valoran muy positivamente. Los empleados juzgarán su ciudad y sus condiciones de vida de forma crítica en las actuales posibilidades de trabajo móvil. Para seguir siendo competitiva frente a ciudades próximas geográfica y culturalmente como Málaga o Lisboa, Barcelona debe esforzarse por mantener su imagen de ciudad abierta y acogedora. Existen retos potenciales a tener en cuenta, como la percepción de la seguridad en la ciudad y la falta de claridad en las complejas políticas migratorias que están bloqueando a las empresas tecnológicas para crecer más rápido y, por tanto, provocan la pérdida de talento.

Además, la movilidad y la vuelta al trabajo presencial en la oficina son áreas en las que la tecnología y la sostenibilidad desempeñarán un papel importante en la configuración del futuro de la ciudad. Hoy en día, la mayoría de las empresas de TI ofrecen «condiciones de trabajo flexibles». Compañías como SAP, que ha construido su centro en Barcelona para conseguir que personas internacionales multidisciplinares trabajen juntas, luchan ahora por conseguir que su gente vuelva a la oficina, donde «se crean todas las grandes ideas», según Esperanza Valbuena. Las empresas tecnológicas cuentan con que la ciudad de Barcelona mejore las infraestructuras de movilidad y las condiciones de vivienda para ayudarles a retener a sus empleados en Barcelona.

De cara al futuro

«Nuestra sociedad ha sido testigo de tantas nuevas tecnologías disruptivas en los últimos 20 años como en toda la historia junta», afirma Michael Donaldson, Director de Tecnología y CIO del Ayuntamiento de Barcelona. Este crecimiento exponencial no sólo de oportunidades, sino también de retos, hace de la tecnología un sector clave para que las ciudades inviertan y compitan entre sí. La celebración del Mobile World Congress en Barcelona ya señala al resto del mundo el compromiso de la ciudad en este ámbito.

Pero esto no bastará para prosperar en una industria tecnológica en constante evolución. Utilizar la tecnología para servir mejor a sus ciudadanos, invertir en educación tecnológica para desarrollar el talento local y mejorar las políticas migratorias serán claves para el éxito de Barcelona en el sector tecnológico.

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