Acelerando la digitalización de servicios públicos, por Gabriel Bello
Gabriel Bello Barros
Líder Cisco Networking Academy Brasil
¿Qué destacarías de la gestión que ha hecho de la crisis tu ciudad de residencia?
Por lo general la gestión de la crisis en Brasil ha sido bastante controvertida, aunque algunas medidas sanitarias preventivas hayan sido tomadas antes que en Europa. La digitalización de los servicios públicos ha sido un de los sectores más “beneficiados”, dada la urgencia de hacerlos virtuales. El caso de sistema de justicia de Brasil ha cambiado paradigmas, pasando de uno de los sistemas públicos más conservadores y reaccionarios a la digitalización. Una nueva plataforma de videoconferencia de emergencia para actos procesales se ha utilizado en más de 400.000 sesiones de justicia virtual y está disponible para todos los tribunales y magistrados. Esta digitalización garantizó una mayor cobertura de los servicios judiciales y la estabilidad institucional y la seguridad en el país.
¿Cómo se ha visto la gestión de Barcelona desde tu ciudad?
La gestión de Barcelona se ha visto de manera ampliamente positiva, sobretodo el rigor impuesto inicialmente para hacer valer la cuarentena. Hubieron criticas y temor por la segunda ola, a principios del verano, en el momento en que las restricciones empezaron a levantarse y si publicaron imágenes de personas disfrutando de las playas y fiestas. También se ha hablado mucho sobre como la ciudad está aprovechando la crisis para implementar más rápidamente algunas de sus políticas urbanísticas, tanto para mitigar los efectos del COVID, como para dejar un legado urbanístico y espacios públicos más habitables. Como en el caso del recién anuncio del salto de escalas del proyecto “SuperManzanas”, y la utilización del urbanismo táctico para estimular el distanciamiento social.
Propuesta para Barcelona
Aunque Barcelona ya hace tiempo que trabaja en un proceso rápido de digitalización de sus servicios públicos, todavía existe un largo recorrido para que esta transformación alcance todo su potencial en la gestión de la ciudad y de lo cotidiano. El ejemplo de la digitalización del sistema judicial en Brasil es una prueba más de que incluso los sectores más conservadores y escépticos al cambio pueden adoptar nuevas formas eficientes y seguras de trabajar. Es necesario seguir trabajando y creando incentivos para que la gestión de la ciudad y los servicios públicos, incluidos los más sensibles, también puedan abrazar la transformación digital, ampliando su alcance y aumentando la calidad de vida de las personas.