Tobias Haug: ‘Barcelona puede abordar futuros desafíos’
Tobias Haug, Chief Happiness Officer de SAP
Tobias Haug es un estadounidense de 48 años, mitad norteamericano, mitad alemán, nacido y criado en los Estados Unidos y que se mudó a Alemania hace 17 años. Está casado y vive en Barcelona desde hace un par de años. Es Chief Happiness Officer de SAP, y se encarga de la estrategia de posicionamiento y transformación cultural de SAP Barcelona. Tobias lidera la iniciativa «Humanizing Business» que apoya una cultura de trabajadores comprometidos, empoderados e inspirados, basada en los principios de autonomía y conexiones humanas “New Work”.
¿Por qué elegiste Barcelona?
A nivel personal, Barcelona es un lugar fantástico para vivir, su toque mediterráneo y ambiente internacional, su cultura y su mente abierta nos han hecho sentir como en casa desde un primer momento. Por otro lado, profesionalmente, Barcelona es considerada como el hub de la innovación en Europa, con unas condiciones únicas para atraer, retener y hacer crecer el talento internacional.
¿Qué aspectos de Barcelona destacarías como positivos?
La colaboración entre sectores y actores de la ciudad (social, industrial, creativa y gubernamental) brinda una sensación de innovación y de oportunidad excepcionales. Se están haciendo progresos como ciudad «inteligente y sostenible», apostando por la creación de infraestructuras modernas, de confianza y cada vez más ecológicas.
¿Qué aspectos de la ciudad deben mejorarse? ¿Cómo?
Se necesita estabilidad política para garantizar las inversiones y un tejido social fuerte para aumentar la seguridad psicológica necesaria para la innovación; y son necesarias maneras más estables de garantizar que la población, no solo las clases privilegiadas, se beneficien de los éxitos de ciudad.
¿Cuáles son las fortalezas de la ciudad que le permitirán superar la crisis de COVID-19?
La ciudad tiene muchos activos que han hecho un gran trabajo en unas condiciones extremas. Esto es otro ejemplo de la capacidad de Barcelona para abordar futuros desafíos; el papel de su ciudadanía y su espíritu de colaboración ponen de relieve el verdadero «network thinking”, demostrando que “¡Barcelona puede hacer que pase!”
¿Qué otros desafíos crees que enfrentará la ciudad una vez que termine la crisis de salud?
Es necesario un nuevo enfoque en la creación de planes de estabilidad social, para poder gestionar el impacto (esperemos que) a corto plazo del sector de turístico, uno de los sectores de mayor relevancia para el tejido empresarial de la ciudad y en el desarrollo de su imagen. Esta crisis puede servir para pivotar hacia un futuro más sostenible y socialmente equilibrado, creando oportunidades de trabajo e infraestructuras que sean una apuesta de futuro.
¿Qué esperas de Barcelona en los próximos años?
Como modelo de inclusión, tiene un importante papel en los próximos años: desarrollar una internacionalización inteligente y lograr un equilibrio entre las prioridades medioambientales y económicas de la ciudad. La crisis del Covid puede ser un punto de inflexión para hacer los ajustes necesarios en materia social, sostenible y colaborativa.
Qué ciudad sientes como «tu ciudad»? ¿Qué es lo que más echas de menos?
Barcelona es «nuestra ciudad”, ni mi esposa ni yo podemos imaginarnos viviendo en otro sitio. Aun así, lo que más echo de menos son las estructuras de apoyo con relación a la sostenibilidad, como el fomentar la inversión en energía solar, un mejor aislamiento o códigos de construcción modernos. Aparte de eso, ¡lo que más echo de menos es una típica barbacoa sureña!